Las autoridades de varios municipios de Nuevo León han comenzado a implementar cambios en los reglamentos municipales de Tránsito para mejorar la fluidez vial ante choques leves. El Alcalde de Monterrey, Adrián de la Garza, mencionó que, aunque cada ciudad adoptará medidas diferentes, la evaluación de su efectividad permitirá generar un modelo homologado que beneficie a toda la región.

Diferentes Reglamentos Municipales de Nuevo León
Los municipios de Monterrey, San Nicolás y San Pedro están implementando reformas para agilizar el tráfico generado por los accidentes de tránsito menores, conocidos como “choquecitos”. Sin embargo, cada uno está adoptando enfoques distintos. Mientras que en San Nicolás y San Pedro se han establecido reglas más estrictas, Monterrey avanza en la reforma de su reglamento para permitir que los conductores muevan sus vehículos tras un accidente leve, sin la necesidad de esperar a la presencia de un oficial de Tránsito.
Adrián de la Garza, quien también lidera la Asociación de Alcaldes de Nuevo León, destacó la importancia de este tipo de reformas, explicando que estas deben adaptarse a las realidades de cada municipio. Según el alcalde, las diferentes ciudades podrán compartir sus experiencias para encontrar el modelo que mejor funcione a nivel estatal.
El objetivo de estas modificaciones es reducir los congestionamientos que ocurren tras accidentes menores y evitar que los conductores queden atrapados en largas filas esperando la llegada de las autoridades. La clave, según De la Garza, es realizar pruebas y evaluaciones para entender cuáles son las reformas más efectivas.

Modificaciones Claves en el Reglamento de Tránsito de Monterrey
En Monterrey, la propuesta aprobada en comisiones de Cabildo permite que los conductores involucrados en choques leves tomen fotos o videos del incidente y posteriormente orillen sus vehículos para liberar la vía. Esta medida tiene como fin reducir los tiempos de espera y mejorar la circulación, permitiendo que el tráfico se recupere más rápidamente.
Sin embargo, es importante señalar que los conductores no podrán mover sus vehículos si hay personas lesionadas, daños a bienes públicos, o si alguno de los involucrados está bajo los efectos de alcohol o drogas. Estas medidas, aunque flexibles, buscan equilibrar la eficiencia vial con la seguridad en el lugar del accidente.
En cuanto al proceso legislativo, el reglamento de Monterrey aún debe ser aprobado en el Cabildo, pero se prevé que este avance sea un modelo para otras ciudades de la zona metropolitana de Nuevo León.
Evaluación de las Reformas y Posibles Nuevas Modificaciones
El Alcalde Adrián de la Garza indicó que, aunque cada municipio tomará su propio camino en la implementación de estas reformas, el seguimiento a los resultados permitirá establecer un reglamento más uniforme. Las autoridades municipales están comprometidas en crear un modelo flexible, donde se puedan introducir modificaciones basadas en la experiencia y el análisis de cada ciudad.
La implementación de estas reformas será evaluada durante los primeros meses de funcionamiento para verificar su efectividad. De acuerdo con De la Garza, los municipios deben ser conscientes de que no existe una solución definitiva, por lo que el objetivo es ajustar las reglas según lo que funcione mejor para los conductores y la ciudadanía.
Enfoque en la Flexibilidad y Seguridad Vial
El enfoque principal de estas reformas es permitir una mayor fluidez en el tráfico, sin descuidar la seguridad de las personas involucradas en los accidentes. Los reglamentos también incluyen un componente educativo, donde los conductores serán informados sobre las nuevas reglas y la importancia de actuar con responsabilidad.
Con este enfoque, los municipios de Nuevo León buscan hacer frente a un problema recurrente y mejorar la calidad de vida urbana al reducir los inconvenientes causados por los choques leves. A largo plazo, se espera que estas reformas contribuyan a una circulación más eficiente y segura para todos.